CUÁNDO IR A TERAPIA

Cada periodo de la vida tiene sus propios desafíos. En el caso de las personas mayores, estos desafíos son la jubilación, el apoyo logístico hacia los hijos, el cuidado de los nietos, la pérdida de la salud física propia, dolor crónico, la pérdida de la salud física o la muerte de la pareja, de familiares o de amigos. Además, se puede sumar el que los propios hijos, (y con la mejor intención de ayudar), empiecen a tomar decisiones por la persona mayor e intervengan en facetas en que el mayor es todavía autónomo. Si esta situación sobrecarga y supera a la persona mayor, es necesario ir a terapia. Pero no hace falta que la persona mayor esté superada por las demandas, el deseo de tener un apoyo para gestionar más eficientemente dichas demandas, y así gastar las energías en aquello que realmente importa, es suficiente para iniciar la terapia.

Áreas de trabajo

Ayudar a cuidarse mejor de sí misma la persona mayor

Aprender a decir que no a las tareas que le sobrepasen

Gestionar el dolor crónico

Saber solucionar conflictos con diplomacia (asertividad)

Gestionar su tiempo libre

Procesar el Duelo por las diferentes pérdidas

Trabajar cognitivamente para retrasar el deterioro cognitivo