Por la experiencia personal de cada uno, nadie duda hoy en día que lo que hacemos (nuestras conductas) y cómo nos sentimos (nuestras emociones) influyen en nuestra salud.
Muestras de conductas que afectan a nuestra salud podrían ser: comer en exceso, inactividad física, seguir indicaciones médicas o no seguirlas, fumar, etc. Ejemplos de emociones que influyen en nuestra salud tendríamos: miedo, nerviosismo, angustia, rabia, ansiedad, tristeza, etc.
Tanto dichas conductas como dichas emociones pueden ser el origen de muchas enfermedades: obesidad, hipertensión, diabetes, trastornos cardiovasculares, úlceras, colon irritable, cefaleas, etc. O ser la consecuencia de nuestra enfermedad. Si tenemos una enfermedad crónica, estaremos tristes, inseguros, con miedo, estresados y, además, nos puede llevar a conductas poco saludables. Esto también puede hacer que nuestra enfermedad se agrave. Podemos entrar en un círculo que mantiene nuestros problemas médicos y emocionales.
Relación entre estrés y enfermedad.
Las investigaciones científicas de la Psicología de la Salud cada día nos aportan más datos sobre la relación entre el estrés y el origen de algunas enfermedades, si tenemos predisposición.
Factores comportamentales (conductuales) y enfermedad
Entre los usuarios de los centros de salud se estima que entre un 60 y un 75% de las consultas están asociadas a factores comportamentales, tales como: estilos de vida poco saludables, trastornos psicofisiológicos, somatización y trastornos emocionales asociados.
Qué pueden aportar los psicólogos de la salud
Los profesionales de la Medicina atienden a la parte física de la enfermedad, pero es importante saber qué podemos hacer las personas cuando tenemos alguna enfermedad, entender que nos está pasando y prevenir para que no se incremente el problema, cuidando nuestras conductas y manejando las emociones negativas que puedan surgir como consecuencia de la enfermedad.
Para ayudarnos en esa fase está la Psicología de la Salud. Los profesionales de la Psicología somos un aporte fundamental para el paciente en el afrontamiento de muchas enfermedades. Desde la evidencia científica, evaluamos y planificamos cada caso para seleccionar las estrategias y técnicas más adecuadas para mejorar la calidad de vida de las personas que padecen enfermedades.
Los psicólogos intervenimos en los factores psicológicos de muchas enfermedades: síndrome del intestino irritable, obesidad, dolor crónico, cefaleas, hipertensión, trastornos cardiovasculares, asma bronquial, cáncer, trastornos dermatológicos, fibromialgia, alopecias, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, etc. Si quieres sabes más, pregúntame o llámame. (CONTACTO).
Una respuesta
Dices que el dolor crónico puede ser tratado psicológicamente. ¿Acaso podrías reducirme el dolor? Y si no es así , que otro beneficio tendría entonces la terapia?